Vacacionar es, sin duda, una de las fechas que esperamos con ansia durante todo el año, pues se trata del momento para descansar, despejar la mente y disfrutar de un merecido receso tras meses de ardua labor; sin embargo, no siempre nos es posible hacerlo en temporada alta (marzo, julio, agosto) y nos lamentamos al ver cómo nuestros amigos y conocidos preparan sus maletas para salir a la playa.
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Si el caso anterior te resulta familiar, no te preocupes, pues una de las grandes ventajas que ofrece el turismo en México es la disponibilidad de los 365 días, por lo que mientras unos se entristecen por el fin de las vacaciones de verano, otros más lo celebran, ¡pues se trata del comienzo de la temporada baja! y es elegida por el 30% de los mexicanos como la preferida para poder viajar.
¿Por qué gastarás menos dinero viajando en temporada baja?, ¿cuáles son sus beneficios? Presta atención al siguiente listado.
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Febrero, abril, mayo, octubre y noviembre son los meses idóneos para adquirir boletos de avión o autobús, pues a diferencia de marzo, julio, agosto y septiembre, la demanda de vuelos y corridas se reduce considerablemente y, en consecuencia, el precio de los pasajes en aeronaves tiene una reducción considerable.
De acuerdo con la empresa Airlines Reporting Corp, los días idóneos para encontrar buenas ofertas de boletos de avión son domingo, sábado o martes.
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Durante la temporada baja, las cadenas de hoteles aprovechan para lanzar ofertas y descuentos de fin de semana, ya que después de las vacaciones de verano, la ocupación en los meses previos al invierno es baja, por lo que te sugerimos hacer más de una revisión en la web de las promociones que estos hoteles tienen para ti.
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Si planeas usar tu choche en lugar de adquirir boletos de autobús o avión, tendrás la ventaja de que, tras pasar la temporada alta, el tránsito en autopistas a destinos como Acapulco, Puerto Vallarta, Tuxpan o Puerto Escondido, no estará al tope y te salvarás de esas filas de hasta dos horas que significan un despilfarro de billetes en gasolina, pues podrás hacer tu recorrido sin retrasos de este tipo.
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En las mismas fechas antes mencionadas, podrás aprovechar para adquirir a un precio muy accesible los artículos necesarios para tu viaje (sandalias, gorras, gafas, googles y ropa en general, por ejemplo), ya que en algunas tiendas departamentales hay precios por liquidación o fin de temporada. Aprovéchalos.
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Considera que al viajar durante temporada baja las interminables filas en restaurantes no serán un problema para ti; además, por la menor afluencia turística estos negocios “no encajan el diente” como en las vacaciones veraniegas o invernales. Es decir, comer en un restaurante en febrero u octubre, te costará menos que si lo haces en agosto.
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Aventúrate a viajar en esta temporada baja y comprueba que tu experiencia será increíble al disfrutar de destinos exquisitos a un precio más accesible y, especialmente, evitando multitudes de turistas.
